Invitados por las productoras de ¨Belgrano una película pirata¨ se reunieron en el predio de Villa Esquiú y dejaron su mensaje.

Organizado por las productora de la película “Belgrano una peli Pirata”, Cine El Calefón y Los Surcos del Viento, se realizó el 1 de diciembre un almuerzo en el predio de Villa Esquiú con los integrantes del plantel de 1968.
El encuentro contó con la presencia de gran parte de aquel histórico plantel: Alberto Piedra, Jorge Marotta, Víctor Vega, Rafael Palacios, Lorenzo Cabrera, Miguel Garay, Luis Cornejo, Antonio Syeyygüil,Alberto Licciardi, José Reinaldi, Domingo Ceballe y Hugo Carballo.
Durante el desarrollo de la comida, los productores entrevistaron a los ex jugadores, registrando anécdotas y recuerdos de la época. Sobre la filmación, Gastón Bailo –uno de los directores- destacó: “Elegimos al plantel del 68 por la importancia y lo que representan: Ser el primer plantel, el primer grupo humano de Belgrano. Además, sabíamos que, más allá de ser un grupo de ex jugadores, son amigos y eso era algo que nos interesaba rescatar para la película. Por otro lado, queríamos homenajearlos, pensando en los hinchas más grandes”.
El equipo de 1968 es emblemático para Belgrano, porque fue el primero en  jugar un torneo en AFA y el primer representante de Córdoba a nivel nacional. En aquel campeonato se enfrentó oficialmente contra los cinco grandes, destacándose la victoria conseguida ante San Lorenzo de Almagro.

Palabras mayores



A 45 años de ese inolvidable acontecimiento, dialogamos con dos referentes;  Tony Syeyyguil y Mingo Ceballe, que expresaron su opinión sobre el pasado y el presente de la institución.
-¿Cómo se sintieron al reunirse nuevamente?
-T.S.: Ha sido una alegría enorme para mí y mis compañeros habernos juntado nuevamente. Y más en el predio del Club al que tanto queremos. La alegría no es sólo por lo que hicimos nosotros, también es por lo que están haciendo los jugadores actuales. Me pone muy orgulloso la campaña que están haciendo en este momento.
-M.C.: Una alegría inmensa, es como reencontrarse con la familia. Porque han pasado muchos años y nos seguimos juntando. El ejemplo, la formación, el sentimiento, nos lo dio Belgrano. Siempre decimos “qué hubiese sido de nosotros sin este club…”. Significa parte de nuestra vida, este grupo se levanta y se acuesta diciendo “Belgrano”.
-¿Y hoy cómo ven al Club?
 - T.S.: Lo veo muy bien. La época nuestra fue muy dura, nos costaba mucho. Por suerte eso cambió y pudimos salir adelante. Yo sigo toda la campaña de Belgrano y estoy más que satisfecho con lo que se viene haciendo.
- M.C.: Los muchachos de ahora nos están dando una gran satisfacción, tanto jugadores como la dirigencia. Nosotros jugábamos en canchas barrosas, con tapones de goma. Viajábamos treinta horas en colectivo. Hoy vemos todos los elementos que tienen para trabajar los jugadores y es lo que anhelábamos todos. Vemos el predio y sentimos que hay un futuro muy grande.
- ¿Les parece importante recuperar hechos de nuestra historia?
- T.S.: Muy importante, porque sirve de contagio para las nuevas generaciones. Ojalá que nunca se corte eso, para que signos progresando y estando en lo alto. Como se vienen dando las cosas, siento posible lograr un campeonato en Primera División, que cambie para siempre la historia. Siento que se trabaja para eso y que pronto estará la recompensa.
- M.C.: Seguro, de la historia se puede aprender un montón. Nosotros teníamos grandes equipos,  hicimos muy buen papel a nivel nacional, a pesar de ser nuevos. No era fácil jugar  con los equipos grandes. Hoy vemos que Belgrano se planta de igual a igual contra cualquiera, y eso es gracias a que los jugadores comprenden bien lo que significa la historia de esta camiseta.