INSTITUCIONAL
Valorar el camino
06/10/2016
Como siempre decimos, la idea es de proceso, focalizado en el crecimiento constante del Club. Las marcas de Belgrano son históricas y nos posicionan en la élite deportiva.
Como siempre decimos, la idea es de proceso, intentando
tener un plan de largo plazo que nos haga sustentables como institución.
En lo deportivo, por situarnos en alguna de las áreas del Club
(sin duda la que convoca mayor expectativa), la Primera División transita una
renovación transformacional, que es dinámica, progresiva, inclusiva y tiene un
proceso interminable de mejora (a diferencia del cambio).
El actual cuerpo técnico cumple hoy 107 días de trabajo y su
recorrido nos muestra un esfuerzo y una capacidad de adaptación a nuevas
circunstancias, que es parte del itinerario trazado hace años.
En los últimos 80 días disputamos 19 partidos, entre
oficiales y amistosos, recorriendo casi 15.000 Km, con el desgaste logístico,
económico, físico y mental que eso representa. Competir en tres torneos es de
élite y nos empuja a crecer.
Seguramente algunos no ven estos detalles, porque están
focalizados en la foto del hoy, y si hubiéramos perdido frente a Juventud Unida
muchos datos y logros quedarían en el olvido (no de esta organización).
De a poco los juveniles pueblan la Primera de manera
efectiva, sumando minutos y el roce que los lleva al crecimiento en el campo de
juego.
Un párrafo aparte para aquellos que desde hace años son
columna vertebral en la cancha y que con identidad y sapiencia complementan a
juveniles y recién llegados, que portadores de jerarquía cierran el círculo del
equipo.
En estos 107 días volvimos a llegar más lejos que el año
anterior (algo que se repite desde hace tiempo) y las marcas de Belgrano son
históricas.
Con gente de la casa a cargo del plantel y con la cabeza
abierta a la ayuda externa, en la conciencia de que no son dueños de la verdad
sino portadores de una acumulación de saberes que deben aprovechar, proyectar y
aumentar cada día.
Y ahí están todos y cada uno de los tripulantes del barco,
rotando para preservar y premiar esfuerzos, con metodologías de trabajo que
permitieron semejante trajín, con lesiones por traumas, por el fragor de la
disputa y no por sobreuso.
Estar en octavos de la sudamericana fue meritorio y
merecido, estar en semifinal de Copa Argentina, otro paso gigante de
aprendizaje que queremos continúe y nos mantenga en la élite.
Belgrano marcó presencia a nivel continental en estos días,
no sólo por su plantel profesional, sino también por su gente que desbordó
pasión, amor y fiesta en cada uno de los lugares que nos citó la contienda.
La
institución crece, la institución somos todos, felicitaciones.